domingo, febrero 12, 2006

Indignación de domingo

Mismo mientras lo pensaba sabía que era una idea que sonaba a un republicanismo ortodoxo yanki asqueroso; pero... cómo puede ser que un domingo en 6 manzanas a la redonda no halla un puesto de diario abierto en este venerado barrio de Caballito ?. Yo que había bajado con mi resfrio y todo, antes de mis tostadas, sin lavarme los dientes, ni a mí misma, para caminarme cuadras y cuadras para ir dejando puestos de diarios cerrados dentrás de mí; y que encima el policía y el portero ese me mire como si yo estuviera preguntando por una ferretería especializada en repuestos de cueritos suizos y que encima me contesten con tal obviedad que me tenía que ir hasta Flores o Primera Junta.
Extraño al fiel canillita de mi antiguo barrio.

Pero suena Piazzola y la mufa queda ensartada en el bandoneón. Ay, cómo me lloran esos violines . Ay ay ay.